En marco de la caída de ingresos y el ajuste público que implementa el Gobierno, varios intendentes del conurbano bonaerense tomaron la decisión de implementar tasas e impuestos para equilibrar sus cuentas.
Dentro de este marco, los jefes comunales aumentaron la tasa vial, la cual se cobra sobre el precio de los combustibles. Según explica el medio Infobae, los ingresos por esta vía consiste en cobrar un sobreprecio a cada litro de nafta o metro cúbico de GNC que se cargue en cualquiera de las estaciones de servicio ubicadas en cada partido. Entre los municipios que más provecho sacan de esta medida se encuentran Merlo, Pilar y Moreno.
En Pilar, el valor de la alícuota ronda cerca del 2,50% para los combustibles líquidos y alrededor de un 4,50% para GNC.