En la 7° fecha del Torneo Pre-Federal, Sportivo venció por 87-55 a Náutico Hacoaj para continuar como único líder e invicto de su zona. Fue una noche de alegrías para el Rojo, que jugó un gran partido, sumó su sexto éxito y que además disfrutó con la vuelta de Mariano Rabazano a “La Caldera”.
Solo 15 días después de haber sido víctima de un hecho delictivo en Boulogne, en el que recibió un balazo y perdió su ojo izquierdo, el escolta volvió a estar cerca de sus compañeros y de la gente del Rojo. A pesar de lo delicada de la situación, Mariano tuvo una excelente evolución y pudo acompañar al equipo de Marcelo Asturiano, que le hizo vivir una noche a pura emoción.
“Me sentí muy acompañado en todo momento. Desde que pisé la cancha se me acercaron todos a saludarme, darme un abrazo y darme sus fuerzas. En el medio del partido comenzaron a cantar “Mariano, Mariano” y me estaba aguantando para no lagrimear, para hacerme el fuerte. La verdad que sorprende la cantidad de gente y chicos que se acercan y me desean fuerzas. Todo eso es increíble y me ayuda muchísimo a afrontar esto que viví. Estoy con muchas ganas de volver”.
Mariano Rabazano.
La pregunta que se hacen todos en la avenida Tomás Márquez es si Mariano podrá volver a jugar pero el no tiene dudas. Y cada vez que se lo consulta sobre eso, tiene respuestas positivas. “Yo tengo muchas ganas de arrancar, pero hay que esperar estudios y ver que dicen los profesionales. No hay que saltearse ningún paso, pero yo hoy me siento al 100%”, manifestó.
En ese sentido, subrayó como clave el acompañamiento del entrenador de Sportivo, Marcelo Asturiano, sobre quien solo tuvo palabras de elogio. “Marce es un tipazo, lo veo como un entrenador y un familiar porque desde el día uno fue al hospital, estuvo acompañándome y se fijó en deportistas que pasaron por mí misma situación”, remarcó.
“Me dio mucho ánimo para que pueda seguir y siempre estuvo comprometido a ayudarme. Mismo esta semana me dan los estudios y él quiere estar ahí conmigo para saber cómo manejarse en los entrenamientos y demás, pero la verdad que es un tipazo”, sumó.
En el cierre de la charla, Mariano contó con alegría y felicidad la llegada de mensajes de distintos clubes y jugadores, que le enviaron fuerzas y muestras de solidaridad en momentos muy difíciles. “Primero que nada agradecerles. Yo estuve tres días internado sin el teléfono y cuando lo agarre vi que tenía 2000 mensajes, no lo podía creer. Me tomé el tiempo de responder uno por uno porque todos se tomaron un minuto para enviarme fuerzas y lo mínimo que podía hacer era agradecerlo. Es algo increíble, me ayudó mucho a recuperarme, más que nada desde lo mental”, confió.
La recuperación de Rabazano es rápida y visible aunque todavía le quedan algunos pasos. Según contó, deberá afrontar un par de cirugías más antes de volver decidida y plenamente a disfrutar de su pasión.