La Unión Tranviarios Automotor (UTA) dio marcha atrás con el paro de colectivos y espera con ansias dar por terminada la negociación que tendrá lugar este miércoles a las 13 horas.
Así lo informó la entidad a partir de un comunicado en sus redes sociales, en «procura de la paz social» y «no paralizar un servicio de gran relevancia para millones de personas», la medida queda suspendida y se espera que el miércoles 10 haya «una determinación final».
“Si aparecen los $250.000 de diferencia, trabajamos normalmente”, dijo el secretario general de UTA Roberto Fernández luego del encuentro con las cámaras empresarias y la cartera laboral.
En este marco, Fernández determinó el plazo final de la reunión para que se cumpla el acuerdo salarial homologado. La decisión de suspender los servicios queda en reposo hasta nuevo aviso.
El conflicto descansa en marco de la enorme diferencia entre salarios. La UTA reclama que al haber básico de marzo se le incorpore la suma no remunerativa de $250.000 pactada para febrero, mes en el que el sueldo inicial alcanzaba los $737.000. En resumen, el sindicato pide que el básico a cobrar sea de 987.000 pesos.
Desde la Secretaría de Transporte afirman que “no tiene injerencia en los acuerdos de paritarias que mantiene la UTA con la patronal, no es parte del acuerdo y por ende no es responsable de los mismos. La Secretaría de Transporte de la Nación hizo lo que le correspondía y concretó un reconocimiento de costos del sector, manteniendo diálogo con las Cámaras. No puede intervenir de otra forma ya que no es parte del conflicto”.