Este miércoles a la noche, el debate de candidatos a vicepresidentes se llevó a cabo en el programa A Dos Voces del canal TN (Todo Noticias) bajo la conducción de los periodistas Marcelo Bonelli y Edgardo Alfano.
La noche consagró a los ganadores y perdedores. Victoria Villarruel, compañera de fórmula de Javier Milei por La Libertad Avanza, fue una de las grandes ganadoras del debate, siendo clara y precisa con sus discursos. Agustín Rossi de Unión por la Patria fue el más descalificado. En tanto Luis Petri de Juntos por el Cambio fue claro en sus propuestas pero no destacó mucho.
Desde el inicio del debate, la libertaria arremetió contra sus adversarios, diciendo que entre todos, como parte de la casta política, juntan 76 años como funcionarios del Estado y les apuntó que fracasaron en la función pública. Posteriormente, centró sus críticas en el oficialismo y la tensión con Agustín Rossi no se hizo esperar: la acusó de defender a los militares y recordó que el padre de Villaruel, ya fallecido, era un combatiente de Malvinas y que vivió del Estado. No obstante, la candidata no demostró flaqueza y fue firme en su respuesta.
Luis Petri, compañero de fórmula de Patricia Bullrich en JxC, encontró dificultades para encontrar un espacio por el cual pueda lucirse. Se mostró en cierta medida tranquilo, pero luego los gritos de la grieta hicieron ebullición en el programa y se llevaron la atención. Junto a Florencio Randazzo de Hacemos por Nuestro País y compañero de Juan Schiaretti, ambos candidatos trataron de no entrar en la violenta discusión que desarrollaron Villarruel y Rossi.
El candidato a vicepresidente de Juan Schiaretti mostró más capacidad para escuchar y proponer ideas. Expuso sus programas cuando le tocó participar de los 8 minutos libres y no levantó la voz para hacerse escuchar. No gritó, sino que esperó paciente para hablar en un tono moderado.
Adrián Ventura, periodista.
Por último, Nicolás del Caño del Frente de Izquierda cuestionó a Victoria Villarruel sobre su postura contra la Educación Sexual Integral (ESI) y resaltó la «mirada negacionista respecto de la dictadura» que tiene la libertaria.